Manuel Añorve y la Inseguridad de 10.

Acapulco amaneció con terribles noticias. En la prensa nacional (Milenio, El Universal) e internacional se publicaron imágenes sobre cuerpos decapitados, narcomensajes y asesinatos en diversos sitios del puerto, que mostraron una vez más esa cara violenta que ha ido ganando espacio gracias a la colusión de las autoridades del ayuntamiento con el crimen organizado y el narcotráfico (en Guerrero es bien conocida la afición de Manuel Añorve por vincularse con esta clase de grupos y hoy la PGR lo investiga por sus nexos con el famoso narcotraficante Edgar Valdés, “La Barbie”).

Las notas de hoy, impactantes por el grado de violencia que demuestran, son muestra clara de cómo se ha ido degradando la seguridad en el municipio durante la administración del grupo de priístas afines a Manuel Añorve, propiciando un clima de miedo que auyenta el turismo y daña a la gente de Acapulco.

A pesar de la campaña que ha pretendido impulsarse para mejorar la imagen de Acapulco invitando a la gente a “hablar bien” del puerto, la realidad ha demostrado que no puede taparse el sol con un dedo. La inseguridad se ha incrementado y las autoridades municipales no dan muestras de intentar hacerle frente.

Los gobernantes deben demostrar con hechos, no con palabras, que realmente les importa resolver los problemas que aquejan a su gente, y Manuel Añorve ha mostrado que sólo le importa él mismo.

La pésima administración de Añorve, que hoy tiene endeudado al municipio con más de mil millones de pesos, aunada a sus vínculos con el narcotráfico y el crimen organizado, tiene a Acapulco en una crisis que no tiene precedentes.

Las promesas que hoy ofrece para Guerrero, son las mismas que hizo para Acapulco. El resultado de las mismas está a la vista.

¿Es ese el futuro que quiere la gente de Guerrero para su Estado?